martes, 20 de abril de 2010

La Procesión


Qué difícil es hablar de la procesión de Jesús de Medinaceli. Llevo semanas dando vueltas y puliendo esta entrada.
Muy difícil, sobre todo cuando uno es cofrade y tiene ya muchos años en los que se ha acostumbrado a ver otras cosas, cosas sencillas, lógicas, tanto como las que indica el sentido común.
¿Para qué o por qué se hace una procesión el Viernes Santo?
¿Cubrir un expediente? ¿Cumplir con una tradición? ¿Cumplir con las reglas? ¿Realizar un acto edificante para todo aquel que participa y también para los que lo ven? ¿Estación de Penitencia?
Ninguna de estas cosas se hacen el Viernes Santo en Madrid en la procesión del nazareno.
Ninguna. No hay decoro, ni orden ni concierto en todo lo que sale por las puertas de la basílica.
Oprobio de los cofrades, vergüenza creo de muchos, por lo menos de un servidor.
Me avergüenza profundamente que esta sea la procesión más importante de Madrid, de una ciudad que tiene a gala ser la capital de España, de una ciudad que posee una historia y una tradición cofrade. Esta procesión no parece organizada ni ejecutada por españoles que tienen un bagaje cofrade. Más bien parece hecha de una forma improvisada, una chapuza cofradiera que parece que intenta solventar una situación con la que se encuentran de repente cada Viernes Santo, como si no esperarán que fuera a tener que llegar el día. Me pregunto si tanto cuesta fijarse en cómo hacen el resto de las hermandades de Madrid su procesión. Quizás piensen que no pueden hacerlo, que son demasiado grandes e importantes para fijarse en cómo hacen su procesión los demás...
Me pregunto si la procesión es un precepto de las reglas de la archicofradía o si es algo que hacen porque sí. Me pregunto qué interés tienen los miembros de junta en hacer esta procesión, si hay algo que les motive a hacerlo o simplemente aparecen por aparecer y están por estar.
La procesión es indigna, en primer lugar es indigna de Él, de la imagen de Jesús Nazareno, un icono de la cristiandad, una de las imágenes con más devoción, una de las imágenes más famosas. Cualquier cofrade de cualquier lugar de España esperaría ver un cortejo nazareno, mejor o peor organizado, con mejor o peor música, portado de distinta forma, pero jamás un cofrade de otra ciudad, a priori, esperaría ver lo que se ve en Madrid y menos asociado al nombre de Jesús de Medinaceli.
Es un procesión indigna de una ciudad cofrade de siempre, ciertamente las cofradías en Madrid han sufrido mucho y se ha perdido mucha tradición, pero no hasta este extremo ¿O quizás sí? Nada tiene que ver esta procesión ni siquiera con la peor de las procesiones de la ciudad.
Es una procesión anti-cofrade en la que curiosamente participan cofrades.
Es una procesión de pueblo, de un pueblo pequeño, sobredimensionada. Como uno de esos lagartos que se hacen grandes en una película japonesa, cuando el lagarto es pequeño puede resultar tierno y entrañable, hasta gracioso, sobredimensionado la cosa cambia.

No sé por donde, ni por qué empezar, si por las promesas y su procesión fantasmal que parece se hubiera escapado del vecino palacio de Linares. ¿O quizás debiera hablar de los tramos antinazarenos?
Porque esta procesión se organiza en varios tramos, tramo de promesas, tramo de mantillas, tramo de nazarenos con cadenas, tramo de nazarenos sin cadenas...
Podría hablar de las insignias y hacer hipótesis de sus significados o con la razón de su ubicación en el desfile, pero sería absurdo porque sé sobradamente que están colocadas simplemente como "separadores", es más estoy convencido de que ni siquiera su existencia responde a una explicación clara y natural en un cortejo nazareno. Sería absurdo, ni siquiera sé cual es el verdadero estandarte de la corporación, de la misma forma que ni siquiera ellos saben cómo llevar y cómo acompañar debidamente una insignia y así las llevan desnaturalizadas y descontextualizadas, un elemento más para la amalgama y el pastiche.
Podría hablar del color de la cera, en esta cofradía, archi, oscila entre el color linterna eléctrica y el de mano sobre mano.
Podría hablar de la presidencia anticofrade, ¿Les da vergüenza vestir la túnica nazarena? ¿No se sienten iguales a sus hermanos o se sienten más que el resto de los cofrades?. Ahí los tienen ufanos, dignos, satisfechos sorprendentemente de algo que parece que les da igual, el acto central de una hermandad, de una cofradía penitencial, su exhibición al público para estos cofrades parece ser el acto menos importante del año.
Podríamos hablar de las muchas promesas ¿No tiene más sentido salir de nazareno, de una forma anónima cargando con una cruz en lugar de caminar arrastrando unas cadenas predilubianas? Ah, quizás no, cuando lo que se busca es que nos vean las vecinas, amigas y compañeras de trabajo sólo hay dos opciones; la primera ser la más humilde y ponerse un chandal y salir de penitente, la segunda ponerse la mantilla y ser la más señora y la más digna y salir de manola. Ambos hechos no tienen mucho sentido, sé que lo de las manolas no es exclusivo de esta hermandad pero redunda en su sinrazón procesional, máxime en una hermandad donde hombres y mujeres pueden vestir la túnica.
Podríamos hablar también del significado de vestir una túnica nazarena, pero ya nos demuestran los esclavos que lo más relevante en esta hermandad es llevar una tarjeta a modo de acreditación, la túnica es optativa, como si de un congreso itinerante se tratara, aquí lo importante no es la túnica. Al final el escapulario es lo de menos, lo que da poder y estatus es la acreditación, la tarjeta, tan cofrade...
Realmente, bien pensando, para qué vestir una túnica nazarena si hay un tramo entero para el grupo de esclavos que obvian, por ser cosa menor seguramente, vestir la túnica. Casí tantos como nazarenos son los esclavos sin túnica. ¿Para que salir en la procesión con la túnica si se puede salir en la procesión con escapulario, bolso y otros complementos tan cofrades?
Diputados anti-nazarenos de tramos que no existen, nazarenos que no saben su ubicación ni su función en un cortejo. Eso sí, con tarjeta...
Cofradía, archi, que no sabe estar en la calle, no sabe que los nazarenos proceden de aquellos hermanos de luz, así incluso se llaman aún en otras partes de España, cuya función era iluminar y preceder a los pasos. ¿Cómo van a saber su función en una hermandad donde no se enseña a vestir la túnica correctamente ni su valor ni significado? ¿Cómo van a hacerlo bien cuando la hermandad no se empeña en mantener el decoro y la solemnidad como hacen o buscan o pretenden el resto de hermandades de España? ¿Cómo es posible que las propias filiales o agregadas de esta corporación lo hagan sobradamente mejor que la "primaria"?
Cuando digo mejor, me refiero a un cortejo ordenado, donde las personas no sólo aporten una fe ejemplarizante, lo único que gracias a Dios se salva, sino un cortejo esplendoroso, rico, vistoso, organizado, simbólico, decoroso ...
Así que dejo aquí este vídeo, pero aviso que lo que se ve en esta ventanita no es más que una cata del menú que nos sirven frailes y archicofrades cada Viernes Santo por las calles de Madrid. Verlo por aquí puede resultar un tanto bochornoso, nada comparable a verlo en directo.


Si hablamos de todo esto, no podemos hablar de la Virgen que se queda en la iglesia para salir al día siguiente, ¿Sentido?
No podemos hablar de la calidad musical, del estilo de cargar o llevar al señor, o de la velocidad vertiginosa, ni de la calidad de los enseres, de las flores, ni de tantas cosas que se hablarían en una entrada normal. Pero es que la procesión de Jesús de Medinaceli no es una procesión normal.

sábado, 10 de abril de 2010

Alabarderos

Antes de comenzar a hablar de las luces y las sombras de los Alabarderos. No sería justo si no reconociese el valor para la semana santa que tiene su refundación. Los Alabarderos con su refundación han recuperado un trozo importante de la Semana Santa de Madrid. Lo han hecho con mucho gusto y eso es de agradecer, bien podrían haber hecho una hermandad nueva, pero quisieron rescatarnos una hermandad para Madrid, esto ayuda y mucho a nuestra ciudad, porque hermandades, congregación en este caso, como esta nos dan el punto de originalidad, de idiosincrasia propia, nos hacen ser diferentes que es de lo que se trata.

La voy a incluir entre las hermandades gremiales, algo importante, pues mucho tuvieron que ver las hermandades gremiales en toda España en el desarrollo de la semana santa y de lo que hoy consideramos cofradías hermandades o congregaciones.
Esta por ser una hermandad militar, tiene un sello muy particular. Lo que ocurre que quizás ese sello sea un tanto excesivo.


Me gustan muchas cosas de esta hermandad. En primer lugar la disciplina militar con la que salen a la calle, es de agradecer.
Quizás sean demasiado marciales, pero viendo otros excesos, incluso el propio Viernes Santo se agradece.
A la gente le gusta mucho esta hermandad, han demostrado que con un crucificado, siendo una hermandad de corte "austero" también se pueden hacer las cosas con gusto y eso lo aprecia mucho la gente. Claro está, se nota mucho en el crecimiento de esta hermandad el apoyo de su "gremio" de los militares, y el apoyo del público que es muy fiel a los desfiles militares, que sabemos que en Madrid gustan.
Los nazarenos desfilan con mucho rigor, gracias, lo único que habría que enseñarlos que el cirio no es un fusil...
Faltan insignias, mal endémico de las hermandades en Madrid, falta también nazarenos.
Me sorprendió inicialmente la falta de presidencia hasta que advertí que eran los que iban tras el preste, no, ese no es su sitio, la presidencia debe presidir la hermandad, justo quizás detrás del "batallón de honor" pero en cualquier caso formando parte del cortejo nazareno y por supuesto vistiendo la túnica, ser de la junta de gobierno no exime de hacer la estación de penitencia, es más hay que vestir la túnica como el resto de hermanos.


La música, es muy acertada, es lo que más me gusta de esta procesión, es muy de agradecer, le da un sello propio muy interesante.


El paso anda bien, como debe andar un paso de estas características y sobre todo con un crucificado, me gusta que se lleve todo el costero y que sean conscientes de que son un paso-parihuela, esos faldones que hay por hay no... Pienso que además al cargarse por todo el paso el peso se distribuye mejor.
Buen detalle el de la campana, volvemos al tema de las "características propias".


Pero cuidado, no podemos pensar que todo se justifica en razón de la especialidad, no todo es idiosincrasia, a la exclusividad y al sello hay que ponerle el punto adecuado.
Esta hermandad puede sacar pecho, con el poco tiempo que lleva ya hace cosas mucho mejor que otras con más tiempo en la ciudad, pero eso lamentablemente no es un gran mérito. En España hay muchas hermandades más nuevas que hacen las cosas mucho mejor, y con "sello propio" quizás porque tienen la experiencia cofrade de la ciudad y saben dónde poner el acento particular y donde no.


El cuerpo de acólitos, me alegro de que se vayan incorporando a las hermandades madrileñas, es una buena labor para los jóvenes, hay que enseñarlos la gran importancia de su labor. Lo que he visto es que en Madrid los acólitos son un poco "sui generis" según las cofradías, No.


En esta ocasión los ciriales vestían la túnica sin antifaz y pertiguero o pertigueros roquete, muy bonito por cierto lo mismo que los incensarios... Total, desbarajuste. Aparte está una vez más de la diferencia en las maneras de portar los ciriales.


Volvemos a decirlo: Una insignia de una hermandad, un cirial, no es ni un banderín de ordenes, ni el banderín de la unidad...


El fallo principal de la hermandad... Lamentablemente está en lo más alto. El cristo. No es el adecuado ni para la hermandad, congregación perdón, ni para la ciudad. Es un cristo desproporcionado, con un gesto poco agraciado, difícil de clasificar. Eligieron mal el escultor.

Fotografía de Flickr Ags_madrid

Así pues a pesar de la dignidad con la que lo llevan, el cristo pierde. Es pequeño además, igual que la cruz. No es en absoluto el cristo que esta congregación debiera tener, me parece.

Tampoco entiendo ni veo bien la salida desde el Palacio Real, quizás haya una razón, pero creo que esta hermandad, como todas si les es posible, debiera salir de su sede canónica, otra cosa es que a lo largo de su recorrido entrase en la capilla de Palacio para hacer allí estación de penitencia ¿Por qué no? Ya que parece ser que la Catedral está para otros fines...

Luces y sombras, pero en general mejoras. Queda mucho por cambiar, felicito a esta corporación por haber sabido incluir elementos particulares, propios, por buscar un sello característico, pero les llamo la atención no todo se justifica con el sello, hay que entender que esto es una procesión, no un desfile, hay que perseveran en darle el carácter de procesión. Hay muchas hermandades de estilo más serio y sobrio a las que se puede buscar como referencia, sin perder personalidad, incluso en la ciudad, sobre todo para esos aspectos de "técnica" cofrade con respecto al cortejo.

domingo, 4 de abril de 2010

Macarena y Gran Poder.

Como siempre, aunque algunos me acusen de anti-macareno, he de decir que me gusta mucho y es el mejor palio de la ciudad. Al menos el que a mi más me gusta. Teniendo en cuenta que solo hay dos.

La virgen preciosa, vestida con mimo y elegancia, creo que es un auténtico lujo para esta ciudad esta dolorosa de Eslava, y creo que tiene un palio portentoso en los detalles y calidades.


Sólo le pongo el pero de los andares, podrían mejorar, hacerse más macarenos, mas sosegados en cierto momento. El repertorio igualmente debiera ser más macareno, para eso es la macarena.

Del Gran Poder, no me gustó la túnica, creo que aunque se observa un salto de calidad con respecto a otras hermandades y que nos quisieron enseñar el rico patrimonio que tienen, está muy avenjentada y daba un brillo muy, muy apagado.





De andar sobrado, pero no es el andar que más le conviene al gran Poder, claro, ambos pasos ceden en el andar que les caracteriza en Sevilla, el señor va mucho más lento que allí y la virgen más rápida.


Por lo demás, paso portentoso.

Cortejo, de un gusto exquisito, insignias, túnicas, nazarenos, acólitos, todo muy bien. Lástima que no se puedan usar las dalmáticas, porque creo que ganarían en solemnidad.

Ahora voy a introducir un tema aquí no expuesto. La necesidad de una carrera.

El Jueves me di cuenta del asunto, ya se ha hablado por ahí, de que hace falta una carrera oficial, y no la hay. El Jueves Santo se hizo evidente esa necesidad.


Dos recorridos muy cercanos, con personas más bien mayores apostadas en puntos comunes o cercanos, carreritas para irse de uno a otro y un recorrido corto, a la gente le sabe a poco, pero además se hace muy muy incomodo de ver y de ir de uno a otro, porque la gente, como es lógico, espera, y el que espera desespera... Madrid con solo dos hermandades que ver el Jueves, se convierte en una ratonera.


A esa gente que espera y que gasta tanto tiempo de anticipación le harían un gran favor con una carrera.


Creo que es de pensárselo y mucho.

Que la carrera culmine o no en la Catedral no es impedimento para fijar un recorrido común y facilitar la contemplación de las hermandades a tanto público. Hay varios lugares que podrían servir también para hacer la necesaria estación de penitencia en caso de que el cabildo catedralicio siga oponiéndose: Colegiata, San Francisco el Grande son los dos mejores ejemplos. Es posible hacerlo en Colegiata aunque salga de allí la macarena, ya que la Macarena lo haría a su regreso y el Pobre lo podría hacer nada más salir, habiendo salido ya la Macarena. Pero estación de verdad, como mandan los cánones, no unas arremetidas al estilo de Triana en el baratillo...


Poco más que decir de esta hermandad, y también del día, esperar que el día se complete alguna ocasión con otra hermandad, pero a ser posible por el centro y con una carrera oficial, sería lo mejor para nuestra semana santa.


Fotografías ambas del blog viendo Madrid




Jesús el Pobre

De la procesión-estación de Jesús el Pobre se puede decir mucho o poco, según se mire.

Me voy a explicar; no se puede negar que esta hermandad ha mejorado, no sólo lo digo yo, sino que es una opinión mayoritaria en el público que se cita para ver pasar a esta hermandad.


El público de Madrid no es ni mucho menos un entendido cofrade, dista mucho de otros públicos, y aún así hay diferencias entre el comportamiento, lo que espera de unas y otras hermandades, lo que exige, lo que disculpa etc.

Anque por contra hay, poco a poco cada vez eso un reducido sector de público más entendido, después de pasar Nuestro Padre Jesús Nazareno "el Pobre" un señor de mediana edad se marcho, diciendo: "ya he visto lo que tenía que ver". Frase un tanto enigmática, cómo a su lado había una señora, seguramente su mujer, que le invitó a esperar a la virgen este hombre dijo, para rematar la faena: "La virgen es mejor no verla, es muy mala, vamos a coger sitio para ver al gran poder y a la macarena". Muy descortés y muy irrespetuoso, todo sea dicho de paso, pero razón no le falta, sólo que hay momentos en los que conviene no decir nada.

Yo sí me quedé.

Antes de hablar del señor, de su paso, del cortejo, me voy a despachar con el palio:

No vi la salida, según ciertas señoras es una pena, porque es lo mejor, con el esfuerzo que hacen. No lo sé, pero he oído que es verdaderamente difícil.

La Virgen del Dulce Nombre no es una joya de la escultura, sinceramente, creo que Lourdes Hernández hace cosas mejores, con bastante, pero no solo eso, si encima se la viste así, la cosa empeora y mucho.

Lo primero que me sorprendió el exorno floral, y es que parece que el Pobre se ha empeñado en tener como modelo a la sevillana hermandad de la Esperanza de Triana. Las flores rosas, son normales, sobre todo atendiendo a la advocación, pero cuando ya entramos en un rosa tan fuerte, magenta, la cosa varía y queda mal.
Acepten mi recomendación, mejor unas flores con un rosa más débil, mucho mejor.

El paso-parihuela de palio, podría ser hasta "gracioso" pero claro, queremos tener lo que no tenemos y "aparentar" y la verdad el resultado es nefasto. La repostería es una técnica que usada con mucha mesura, en según qué enseres, puede arrojar un resultado positivo, usada masivamente como en el palio y el manto de la virgen da un resultado antiestético.

Sin embargo tienen suerte en la hermandad de Jesús el Pobre y el público embelesado en otras cosas no se fija en este detalle, que no es que necesite que uno se fije, sino que salta a la vista.

¿En que se fija el público?
En el Baile.

Sí, en el baile, expresión que pude oír varias veces "mira como bailan a la virgen"
O sea, que con un hijo sentenciado a muerte, azotado, coronado de espinas, vilipendiado, insultado, despreciado, etc. a la virgen le daban ganas de bailar... Claro... Por favor, se trata de mecerla a los sones de su marcha, siempre teniendo en cuenta que: "camina"

¡Y que baile!
Como esta hermandad mira mucho a Triana pues no es por menos que dar un paso o dos para atrás, cimbrear el varal hasta que se rompa, quizás el resultado sea que en pocos años haya que pensar en cambiar el palio o aún peor, y esto si que no quisiera yo, que tuvieran un accidente.

¿Por favor, no ven cómo andan otros pasos de palio? Me dirán ahora que no se puede andar igual por que es tipo "trono", y yo les digo: Cámbienlo. Van a ganar por todos los lados, no pasa nada por cargar por dentro, no dejan ustedes de ser madrileños, hay pasos cargados por dentro en muchos sitios de España.

Yo recordaba a esta dolorosa con corona ¿Porque el día de su salida no la lleva? Esta vez sí es una pregunta no una observación, ya que ciertamente da igual. Es precisamente en la vestimenta de la Virgen del Dulce Nombre, en el tocado donde se ve más esa influencia trianera, yo me pregunto si es debido a la cercanía de la macarena, y de los gitanos. ¿Ha decidido por eso el Pobre convertirse en la Triana de Madrid? Por favor, dejen de hacer el ridículo y vistan a esa dolorosa con un pelín de más gracia, en eso ha empeorado y mucho la cofradía.

Sin embargo en otros aspectos ha mejorado, desde la última vez que la ví, ahora el cuerpo de acólitos ha ganado un poco de más dignidad, pendiente el de la virgen sin embargo, siguen teniendo insignias de mala calidad, pero llevan un cortejo bastante bien organizado, las bandas tocaron bastante bien, aunque sigo pensando que sobra la banda de la cruz de guía y que el repertorio de la Agrupación que seguía los pasos del nazareno no era el mejor, con un repertorio ya muy oído y además poco apto a este nazareno. ¿Soy el único que piensa que le iría mejor una banda de cornetas y tambores? Es más, Triana no tiene agrupación sino cornetas y tambores, ya que es el modelo a seguir...

El Pobre, bueno, otra vez volvemos al tema túnica y bordados de repostería... No me repito, pero me pregunto ¿No sería mejor que en lugar de estrenar cada año una túnica nueva de repostería hacer una de bordado de calidad de una vez? ¿De qué sirven 100 túnicas malas? Eso sí, como no va a ser todo malo, quiero decir que el cristo iba en su punto, el exorno floral aquí sí era muy adecuado, el paso en general es un paso bonito, aunque a mi no me guste esa imitación de faldones con respiradero, hasta el dibujo de la túnica me pareció bonito, lástima que la calidad no sea la que el Pobre se merece.

Eso sí, los andares... no, esos andares no, de ninguna manera, al nazareno "el Pobre" no lo llevan, lo rebotan, a veces parece que tiran de él.

Sin embargo, esta Triana de deshecho encanta, gusta, todo se le perdona, todo se pasa por alto ¿cuál es el secreto para convertirse en la cofradía señera del día? ¿Porque haciendo los despropósitos que hacen es la que más público congrega?¿Por qué ese histerismo?

Porque la gente lo siente como propio, lo llegué a oír de refilón "este es de aquí, es de Madrid"


Y esta conversación resume algo que he dicho mil veces, en muchas ocasiones. Aunque el pueblo de Madrid acoge, el pueblo de Madrid aprecia cualquier esfuerzo cofrade, aún con un aplauso a destiempo, aunque el pueblo de Madrid es un analfabeto cofrade, distingue y entiende muy bien entre devociones propias y ajenas. El modelo estudiantes y pobre, si me apuran, es más valorado por los madrileños que el de Macarena y Gitanos, porque lo que los madrileños valoran más que el tan "denostado" estilo, es la imagen en sí, la devoción en liza, y claro sienten al Pobre como una devoción propia. Fíjense en el dato, siendo el Pobre más nuevo en cuanto a su hermandad y a salir en procesión cargado por "fuerza humana" lo valoran más que a la hermandad de la Macarena que lleva más años, eso es por algo. Y una advertencia al mismo tiempo. La lección es muy sencilla:


Los madrileños valorarán siempre más a un cristo a una virgen que no sea copia de ningún lugar antes que a una devoción importada. Es así, y es lógico.



Dirán que quizás esta entrada ha sido dura, pero creo que debe serlo, el Pobre puede y debe mejorar, en beneficio propio y de los cofrades de esta ciudad.